El regulador energético Alberta (The Alberta Energy Regulato) estaba en lo cierto al decir que se necesitan mejores sistemas de detección de fugas para ductos. Debido al envejecimiento de la infraestructura y el aumento de la producción, cada día vemos más fugas en ductos. Las últimas fugas que han tenido lugar en ductos de América del Norte siguen un mismo patrón. Por lo general se han producido por contar con un sistema de detección de fugas que, o bien no detecta una fuga real, o bien emite tantas falsas alarmas de fuga que los operadores de ducto pierden la confianza en sus sistemas provocando una respuesta más en el cierre de un ducto (con las consecuencias que conlleva).
Es demasiado pronto para afirmar que la tardía respuesta de Husky a la hora de detectar la fuga que se produjo el pasado 20 de julio fue por este mismo motivo. Esta fuga que fue verificada transcurridas varias horas, llego a filtrar alrededor de 250.000 litros de producto, gran parte del cual se derramó en el río Saskatchewan Norte, cerca de Maidstone, Sask. La lenta respuesta probablemente le costará una fortuna Husky.
Las fugas de este tipo a menudo se pueden detectar mucho más rápido, reduciendo drásticamente el daño general, pero para ello los operadores de ductos deben contar con un sistema de detección de fugas fiable. La implementación de las recomendaciones de la reciente API 1175 mejorará en gran medida la capacidad global de detección de fugas de los operadores de ductos. Los programas de detección de fugas que sigan esta práctica se comprometen a garantizar la detección eficaz de fugas en ductos, mediante pruebas continuas y mantenimiento de sistemas de detección de fugas y de sus componentes de apoyo, estableciendo así un camino de mejora continua.
Por otra parte, la instalación de un sistema de detección de fugas secundario que cubra la sección del ducto que cruce el río asegura una detección temprana aun incluso cuando se trata de pequeñas fugas. Los sistemas de detección de fugas de HCA (Áreas de alta consecuencia) no están influenciados por las incertidumbres causadas por las operaciones transitorias y mediciones erróneas que están aguas abajo y aguas arriba de la sección de la ducto que protegen, permitiendo detectar las fugas más pequeñas en un tiempo mucho más rápido.
Otra mejora es la instalación de un sistema de detección de rupturas independiente que se alarme con 100% de certeza, dando al operador confianza para cerrar el ducto de manera inmediata. La detección de rupturas está diseñado para detectar el mínimo signo que se produce con un alto volumen, o alta velocidad de liberación del producto.
Suncor es una empresa que merece ser reconocida tras ser capaz de detectar de manera rápida una fuga que se produjo en un ducto al norte de Fort McMurray en la mañana del pasado Viernes. El sistema de detección de fugas detectó la fuga en un par de minutos. Los operadores demostraron que estaban bien entrenados, ya que cerraron el ducto lo más rápido posible e iniciaron una respuesta rápida para tratar de contener un derrame.