Fuertes lluvias e inundaciones afectaron diferentes partes de América Latina en las últimas semanas, causando grandes derrumbes que movieron algunos de los ductos. Los operadores del ducto desconocían que el movimiento rompió los cables de un sensor de presión en un área remota del ducto que recoge datos para un sistema de detección de fugas para ondas de rarefacción de Atmos. Mientras que el sistema competidor pudo determinar que había perdido la comunicación con estos sensores, esta información no fue devuelta al SCADA y el operador del ducto no tenía idea que el sensor había fallado. Los operadores descubrieron que, si se produjese una fuga, el sistema de detección no la habría detectado.
Este fallo destaca la importancia de la mejor práctica de usar señales de vigilancia para verificar constantemente que el hardware y software de detección de fugas están funcionando. El sistema Atmos envía esas señales al SCADA; por ejemplo, una alarma/advertencia común (o conjunto de alarmas/advertencias) y la señal de vigilancia más importante. El sistema de detección de fugas para ondas de rarefacción Atmos Wave, envía actualizaciones sobre el estado de los instrumentos y del GPS junto con la señal de vigilancia.